La acción de cruzar las piernas al sentarse tiene distintas repercusiones sobre la salud. Sin embargo, las tres problemáticas que presentamos aquí pueden reducirse con el uso de Cordus y Sacrus.
Razón 1. Enfermedades crónicas de columna
Al cruzar las piernas se causa un desequilibrio pélvico porque se ejerce más peso sobre uno de los lados de la pelvis. Entonces, la columna vertebral también se desalinea y se adopta una postura curvada y aumenta la tensión muscular. Si esta posición se mantiene de forma prolongada y de manera habitual, se pueden desarrollar contracturas en músculos profundos del sacro y las lumbares. Con el tiempo estas contracturas se convierten en hernias discales en la zona lumbar y en aparición de ciática, escoliosis, problemas en las rodillas, en los órganos pélvicos, entre otros.
Si sueles sentarte con las piernas cruzadas debes tener en cuenta que, en la mayoria de los casos, los problemas graves de espalda se desarrollan de manera silenciosa .
La corrección de posición sacro y descontracturación de los músculos lumbares profundos no es un trabajo fácil para especialistas y puede requerir varias sesiones. Además sera necesario realizarlo de manera periódica. Como opción eficaz: puedes realizarlo sin salir de casa usando las herramientas ortopédicas Cordus y Sacrus
Razon 2: Varices y problemas con circulacion sanguinea en las piernas
Sentarse con las piernas cruzadas puede provocar Insuficiencia Venosa Cronica. El movimiento y la actividad física favorecen el retorno venoso, mientras que el sedentarismo y la inactividad no estimulan la circulación.
Contra eso, la mejor terapia es el ejercicio: caminar, correr, nadar o ir en bicicleta. Siempre a medida de sus posibilidades físicas, pero hay que ejercitarse de forma habitual para favorecer la circulación y mantener una alimentación saludable.
Razón 3. Parálisis del nervio peróneo común
Este nervio está situado detrás de la rodilla, a veces, cuando se permanece mucho tiempo con las piernas cruzadas, se pueden terminar durmiendo las piernas o los pies. Esto ocurre porque dicha postura puede poner presión sobre este nervio y causar la sensación de adormecimiento en las extremidades inferiores.
¿Cómo evitamos estas repercusiones? La respuesta más obvia es no cruzar las piernas, sin embargo, también se recomienda:
- Sentarse en una silla con respaldo, para que toda la espalda esté apoyada y puedas estar lo más derecho posible.
- Evitar sentarse en la orilla de la silla, así será más fácil apoyar toda la espalda en el respaldo ylas piernas podrán apoyarse en todo el asiento.
- Usar reposapiés: la elevación mínima que dan es suficiente para que las piernas descansen y así se evite la acción de cruzar las piernas.
Sin embargo, en caso de que ya sientas algún dolor o te sea imposible cambiar este hábito se recomienda el uso constante de Cordus y Sacrus. Y comenzar con actividad física suave como Pilates, estiramientos, yoga y otros ejercicios que a la vez que fortalecen la musculatura afectada, ayudan a recapacitar sobre esas malas posturas y enseñan patrones de movimiento y hábitos que harán nuestrala vida más saludable.
La aplicacción de Cordus elimina las contracturas acumuladas de la zona lumbar, recupera el espacio natural entre las vértebras, de modo que los discos intervertebrales tomen su lugar y recobren su volumen para eliminar la causa de hernias discales y dolor ciático.
La aplicación de Sacrus en la zona del sacro corrije la alineación de todo el eje espinal, desde la base del cráneo hasta la parte más baja de la espalda: el Sacro y el coxis.
El equipo de Cordus y Sacrus te desea una pronta recuperación.